Pokhara: lagos y cimas sagrados

redacción: Remei; fotografías: Remei y Salva

Llegamos a Pokhara

Llegamos a Pokhara después del trayecto en autobús Kathmandú - Pokhara. ¿Qué tiene de especial Pokhara? Esencialmente, dos cosas:

- El lago Phewa:
la palabra 'pokhara' deriva de 'pokhari', que en nepalí significa lago. No es baladí que la ciudad reciba el nombre de lago. Eso no quita, sin embargo, que haya otros atractivos en esta ciudad:

- Las vistas de la zona de los Annapurnas de los Himalayas.



A solo 30 kms. de la ciudad de Pokhara, las montañas del Himalaya empiezan a elevarse, desde los 1000 hasta los 8000 metros. La cima más escarpada que puede verse, la que por ello más claramente se puede identificar, es el Machhaphuchhare, que literalmente significa 'cola de pez'. De todas las cimas de los Himalayas, creo que esta se convirtió en mi favorita desde la primera vez que la vi, aunque a veces no puedo siquiera pronunciar el nombre. Nunca ha sido escalada, al menos no se sabe con seguridad que alguien haya conseguido poder trepar la escarpada última cuesta del sacralizado Machhaphuchhare, dedicado al dios Shiva.

Por otro lado, como detalle, es mítico el reflejo de los Annapurnas en el lago Phewa, al menos en las postales, pero no tuvimos la oportunidad. Lo que sí vimos fueron los Annapurnas desde el lago.

A algunos turistas no les gusta Pokhara porque es un centro turístico importante del país; dicho vulgarmente, es una ciudad turisteada al máximo. Algunas zonas se han convertido en un sinfín de agencias de parapente, una detrás de otra, llevadas por extranjeros —nosotros mismos quisimos hacer parapente, pero no pudimos por razones físicas de salud, que nos impedían correr, así que nos tomamos dos días de descanso. Para los que quieran hacerlo, las vistas son más que alucinantes: se sale desde Sarangkot y te llevan en jeep hasta arriba (hay gente que sube hasta Sarangkot en una mini excursión, también), desde donde saltas con el parapente en tándem —. 

Por otra parte, los alojamientos no son baratos, al menos no a primera línea de lago: para los viajeros austeros, con presupuesto ajustado, basta con ir a segunda línea de lago. De camino hacia la parte del lago, te pararán varios "relaciones públicas" para que vayas a su guest house, que aún estará lejos del lago; quizá te dirán que ya estás en la zona que tú deseas aunque todavía no hayas llegado, quizá te dirán que más allá ya no hay más guests houses tan baratas como la suya, pero hay que seguir para adelante.

Nosotros nos alojamos en el Be Happy Guest House por un módico precio, aunque, como sucede tantas veces en Nepal, los planes no suceden como uno los tenía previstos y, en este caso, el precio final no salió como se había decidido al principio, sino por 100 rupias más que no subimos en su momento defender. De eso aprendimos y no nos volvió a pasar en la siguiente parada, en Bandipur. 

Fuera de eso, merece la pena hacerle una visita, para descansar unos días, para que la vida solo pase en ese grandioso lago Phewa en el que puedes alquilar una barca en varios muelles, con la que puedes visitar la pagoda Barahi (que no visitamos directamente), situada en una islita o ir al otro lado del lago (depende de a qué lado vayas quizá no vuelves a tiempo para devolver tu barca…).

Aquí dejamos algunas fotos de nuestra estancia en Pokhara. 16 fotos del primer atardecer y la primera noche en Pokhara. La noche se apoderó del lago en poco tiempo. 

Vista desde Be Happy Guest House.

Navegando por el lago Phewa: Más 16 fotos de nuestra odisea por el lago Phewa:

Parapente en Pokhara

Segunda noche en Pokhara: cuando la noche toma con fuerza la ciudad y solo quedan algunas luces a lo lejos del lago...

...y se cena en un local que no solo tiene en la última cara de su menú la traducción de algunas frases que necesitas si haces un pequeño paso por Nepal, con un personal fantástico, mientras el cansancio va haciendo mella en tu cuerpo...:

y empiezas a captar detalles de belleza que quizá sean anodinos, pero que no por ello pierden el valor de ser detalles: